TARTA SALADA DE VEGETALES Y ATÚN Campos

Este mes Salica nos propone preparar una receta cuyo tema no podía ser otro que 

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por eso hemos decidido preparar esta tarta salada que además de ligera y sana es muy rápida y sencilla.

INGREDIENTES:

- 1 base de hojaldre fresca

- 3 cucharadas de aceite de oliva

- 2 pimientos rojos pequeños

- 2 pimientos verdes pequeños

- 150 ml de nata

- 2 huevos

- 1 calabacín mediano

- sal y pimienta

- queso rallado

- Atún claro Campos en aceite de oliva.

PREPARACIÓN:

Extendemos el hojaldre en un molde para tarta previamente engrasado con margarina y enharinado para que no se nos pegue dejando siempre que los bordes sobresalgan un poco.

Pinchamos la base con un tenedor.

Os pongo "fresca" porque también podemos encontrar en el súper hojaldre congelada. 

La primera es mucho más fácil de trabajar, no hay que amasarla, simplemente extenderla pues ya viene preparada, no se os pegará, no tendréis que esperar a que se descongele... pero podremos utilizar la que tengamos. 

En una sartén caliente con 2 cucharadas de aceite rehogamos los pimientos cortados en daditos y sin pepitas, durante 8 minutos o hasta que se ablanden.

Los retiramos y añadimos el resto del aceite en la sartén para dorar el calabacín cortado en dados (no le quitaremos la piel). Lo queremos bien hecho para que no nos suelte mucha agua en la tarta.

Mezclamos en un bol la nata con los huevos batidos, la sal y la pimienta y una vez listo incorporamos las verduras, les damos unas vueltas y ya tenemos listo el relleno de nuestra tarta.

Lo vertemos encima del hojaldre y lo distribuimos con la ayuda de una cuchara para que quede bien repartido.

A continuación ponemos unas tiras de atún Campos encima presionando un poco para que quede integrado.

Espolvoreamos un poco de queso rallado y la introducimos al horno precalentado a 180 grados durante 35-40 minutos o hasta que esté dorada y al pincharla no manche.

TRUCO: Juguemos con las alturas del horno para que nos quede perfecta: primero en el medio para que se haga, luego más abajo para que la base quede bien crujiente y al final unos minutos arriba para que el queso nos quede doradito. Una vez que controlamos nuestro horno esto se hará a gusto de cada uno.

Se puede tomar tanto fría como caliente, si la dejamos templar un poco mejor pues estará más cuajada que recién salida del horno.

Espero que os haya gustado.

Andrea.