Como todos los años, pasamos semanas dándole vueltas a la cabeza para que las sorpresas de un cumpleaños siempre sean mejores que las del año anterior.
Un día a Raquel se le ocurrió hacer una tarta de chuches pues habíamos visto muchas en internet y quedaban muy vistosas, así que decidimos hacer la nuestra.
Menuda aventura!! La base se hace de poliespán, sí, ese que viene dentro de las cajas de los electrodomésticos y teles, (también se puede comprar pero a nosotras nos gustan los retos). Con varios trozos desiguales y mucha paciencia mi hermana hizo la base y la forró con papel de aluminio. Luego compramos como 200 kilos de chuches y las pinchamos con palillos de colores.
Así es como quedó!! (eso sí, en cuanto los niños la vieron no duró más de 5 minutos entera, lo justo para sacarle la foto):
tiene q star rikisima!!!!!
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